2.7.07

el vacío, o de cómo... el vacío

la estrategia es tomárselo todo con buen humor. sentir que el alma existe y que es eso que duele y late a veces, más cuando acostada a un horario nada cotidiano para ejercer eso que se denomina el reposo de la vigilia, y el alma es eso que se encuentra con una ausencia y mi palabra clave desde el viernes o desde antes es busco. y no sé qué, y caminé por una calle al costado de scalabrini ortiz, una calle muy residencial y relativamente callada. repito, caminé cantando "busco (+) otra palabra que pudiera sonar apropiada junto al verbo transitivo" y ninguna terminaba de sonar bien, aunque claro, profesora de traducción, el no me suena no es suficiente justificativo. ninguna búsqueda, señora, sólo la burla a mí misma para hacer más nimia esta nimiedad que me ataca con todas sus patas de enes e íes y emes, porque lo nimio es así, patudo y deforme, y no deforme porque sin forma, sino porque se amolda, plástico, a todo eso que denominamos de tal manera (nimio). imposible llenar esto porque la profesora de itcyl sugirió, citó a los señores que dicen que no existe, y qué desgracia mayor que mostrarme a mí, plástica y maleable y susceptible a influencias todas con argumentos mínimos (nimios), que en realidad nada es completamente seguro, que no hay escapatoria, que la verdad la certeza no se puede agarrar con los puños cerrados y el grito en la garganta porque no, querida, cómo pudo decirme eso, contarlo apenas como un cuento, si hasta las ficciones se me hacen verdaderas, si creo que las teorías son todas verdaderas en esta irrealidad, si la matrix con sus putas pildoritas es otro chiste u otra idea, y en realidad no hay nada y está todo perdido, y una vez volví de una de sus clases hecha una piltrafa y me puse a llorar ahí en mi cama y vino fede y le dije no hay escapatoria y él me dijo pero pensá ju, pensé, y me dijo pensá, todo lo lindo que hay en la vida, y la música y la gente que te quiere, y una vez alguien me dijo no sabés la suerte que tenés y lo recordé y lo recuerdo y fede que decía pensá, ju, lo linda que es la vida más allá de toda la mierda, y las palabras de la profesora cuando hablaba de otro loco de esos que agradan, un loco que decía que era escéptico u otra de esas contradicciones tan coherentes, que una vez sabido lo de la incertidumbre y sabida la noción de la ausencia de escapatoria dijo que listo, que lo único que quedaba era disfrazarse con esa cosa que es el no pensar en esa posibilidad, el seguir inmerso en esto, porque qué son las certezas después de todo, el mundo o esto que creemos mundo y entorno sigue girando y, reales o no, las interacciones continúan y dejar de pensar fede, tal vez ése es el asunto, dejar de digerir ideas todas distintas y dejar de tratar de combinarlas aunque agua y aceite y nafta y el ruido de los autos y de los colectivos y el frío que se cuela por las puertas y ventanas y una bufanda, que además de abrigar es un lexema, y los días y las noches y los clichés, o clisés, como exige la rae, y qué hacer con todo esto, tanto pseudo conocimiento que otro loco dijo que fue por el camino equivocado y que estamos dosmil quinientos años desviados y ese mismo loco dijo que no tenía la solución, que él sólo estaba reventando, demoliendo los cimientos para que algún otro alguien se animara a empezar de nuevo, y le digo, al loco casi querido: te quedaste corto de dinamita.
releo lo escrito y apruebo la gramática, más allá de toda crítica que podría llegar a hacer un experimentado en la materia; intento retomar el principio, tomármelo con humor, reirme un poco de esta gansada existencial e irme a bañar, que es lo que mi organismo necesita, una suerte de purificación afuera-adentro, a ver si absorbo el agua limpia por los poros, ósmosis, diálisis, más palabrejas, chupar la inocencia y la ingenuidad en sus estados más clásicos en vez que enovillarme y enredarme con todo esto, porque quizás tal vez lo más seguro es que no entienda un carajo de nada y no sea más que un ovillo enredado, un ovillo conformista retorcido y abandonado debajo de la cama sobre la cual lloro mis desgracias nimias y patudas.
sí, una ducha y risas descartables. descartables por residuales, risas como flema, como estornudos y tos, risas listas para que me hagan expeler todo lo micróbico y bacteriano de mi alma, ese otro chiste malo. descartables porque las risas se usan una sola vez, y suerte que a veces se las puede considerar recurso inagotable. descartables porque caen así, en forma de espasmos, cual repartidas por un barajador profesional que sabe muy bien cómo cartearse, entonces elige, dos para vos, veinte para mí, y para la semana que viene te paso cuarenta.
la estrategia es... suena a sabrina, la bruja adolescente: "mitosis es..."

1 comentario:

cat dijo...

che jul,decime UN día que sea lunes o jueves al mediodía que puedas venirte para el pago de la facu y jugamos. pero antes de que te vayas! y despues comemos pizzas con ceci, ja.

pero dale, concretemos, sino somos todos efímeramente tristes.

beso

cat